Cuando se trata de comer cosas ricas con gente querida, entre pancitos y snacks, no puede faltar un sabroso untable para acompañar y… ¿existe alguno mejor que el hummus? ¡Es el mejor aliado de las picadas y tablas veganas! Además del excelente sabor que tiene, es a base de una gran legumbre: los garbanzos. Los garbanzos, como la mayoría de las legumbres, son fuente de proteínas, indispensables para llevar una dieta nutricionalmente completa. La receta de hummus que traemos hoy hará honor a toda esta introducción.
A pesar de ser un acompañamiento excelente de tostadas, milanesas y sándwiches, donde más se luce es en una tabla de picada ¿sabes cómo hacer una ideal? Acompaña tu receta de hummus con pan fresco o tostado, pinches de tempeh, verduras en bastón (como zanahoria y apio), aros de cebolla y “alitas” de coliflor.
También puedes preparar hummus saborizado: deberás contar con los ingredientes que desees sumar (como zanahoria o remolacha) al momento de prepararlos. Atención ¡siempre deben estar cocidos! Cuando llegue el momento de colocar los ingredientes en la procesadora o licuadora ¡arroja también tu ingrediente extra! De esta forma quedará integrado a la misma preparación y potenciará el sabor de tu receta.
¿Cuánto tiempo requiere?
Recuerda que siempre debes remojar tus legumbres antes de consumirlas: puedes dejarlas en agua la noche anterior a que vayas a comerlas. Un buen tip es aprovechar los tiempos fuera de casa para remojar. Por ejemplo, hazlo cuando estás en el instituto o en la oficina, así cuando vuelvas ya están listas para usarlas ¡elige tus momentos ideales! Una vez que tengas tus garbanzos remojados esta receta de hummus solo te tomará 15 minutos.
Ingredientes para la receta de hummus
200 gr de garbanzos remojados
1 diente de ajo pelado
1/4 taza de agua
Jugo de 1/2 limón
1 cda. de aceite de oliva
1 cdita. de pimentón dulce
1 cda. de tahini
1 cdita. de comino
Tips Veganos 🥕
¡Tenemos más! Queremos regalarte un consejo para que nada quedé librado al azar en tu preparación. Hablemos sobre el tahini ¿sabes qué es? Es un untable o pasta a base de semillas de sésamo. Además, es el secreto de toda buena receta de hummus. Puedes hacerlo de forma casera, solo necesitarás tu licuadora. Coloca un puñado de semillas de sésamo en la procesadora y tritúralas hasta conseguir una pasta que sea fácil de untar. El tahini es una gran fuente calcio: en 300 mg prácticamente igualas el aporte de calcio de una taza de leche animal. ¡Ya sabes! Dará un sabor único a tus comidas pero también te aportará un nutriente indispensable como el calcio de una fuente que no implique maltrato animal.
Paso a paso
Cocinar. Antes que nada debes tener cocidos los garbanzos. Para esto, luego de haberlos remojado, coloca en una olla los garbanzos con agua nueva y llévala al fuego. Cuando rompa en hervor déjalos hasta que comiencen a ponerse blandos. Otra opción es utilizar garbanzos de lata o envasados, entonces no deberás cocinarlos.
Procesar. Esta receta de hummus es tan sencilla que solo deberás utilizar un accesorio de cocina: ¡el procesador! Como los garbanzos están cocidos también será sencillo triturarlos en una licuadora, minipimer u otro electrodoméstico similar. Arroja los garbanzos cocidos, el diente de ajo pelado, los condimentos (pimentón dulce, tahini y el comino), el agua y el jugo de limón a la procesadora. Pero ten mucha atención ¡todavía no coloques el aceite!
Aceitar. Recién cuando hayas triturado un poco la mezcla comenzarás a incorporar, lentamente, el aceite. Es importante primero procesar el resto de los ingredientes porque será el aceite el que permita controlar qué textura quieres que tengas la receta de hummus: si te pasas de aceite quedará muy líquido, si colocas de menos quedará más pastoso. Si observas que con la cantidad de aceite indicada no alcanzas la textura que deseas puedes agregar un poco más de agua ¡siempre con moderación!
Servir. El hummus es un untable maravilloso que le dará un sabor único a cualquiera de tus comidas pero como dijimos ¡es un gran protagonista de picadas y tablas! Por eso es importante que la presentación sea atractiva para tus comensales: no podrán resistirse a probarlo. Colócalo en un lindo recipiente y decora por encima con un hilo de aceite de oliva y alguna hierba de tu preferencia, como ciboulette, otra opción es añadir un poco más de pimentón.